Cómo preparar la habitación para llegada del bebé

Si en tu casa estáis esperando la llegada de un nuevo bebé, ya es hora de poneros manos a la obra y empezar a preparar la habitación, ya que una vez haya nacido, por mucho que los primeros meses duerma en vuestra habitación en la cuna, será imposible sacar el tiempo necesario para dejarla a vuestro gusto. Entre darle de comer, bañarlo, calmar sus berrinches, y cómo no, haceros cargo de la casa y de vosotros mismos, el tiempo escaseará, así que ahora es el momento. Podéis empezar por ejemplo por sanear el cuarto dándole una nueva mano de pintura. En Multipinturas encontraréis el material a muy buen precio.

En esta web encontraréis de todo tipo de pinturas y para todo tipo de superficies, se pueden hacer virguerías que no se quedan en pintar una simple pared, sino que se puede llegar a dibujar también. Es una de las modas que más triunfa entre los padres, poner unos dibujos en la pared que estimulen su imaginación. Un avión entre las nubes con su nombre escrito en las alas, un elefante, perritos, ositos… Hay un sinfín de opciones, pero la clave quizás esté en que todos estos dibujos que hagamos lleven tonalidades de color pastel para que los pequeños se encuentren siempre relajados.

Una vez tengamos la habitación pintada, yo escogería las cortinas. Las blancas son las que más paz transmiten cuando están cerradas, porque dejan igual pasar la luz. Es conveniente que no falten para que el pequeño tenga su intimidad frente a los vecinos y la propia madre si desea darle el pecho en la habitación. Muchas mujeres aprovechan un pequeño rincón al lado de la ventana para poner una butaca que a la par es mecedora. Ahí le dan el pecho al niño y también la usan para mecerlo y que se duerma con más facilidad que en los brazos y sufriendo menos su espalda al coger tanto peso.

En cuanto a los muebles, tenéis muchas opciones. Yo me decantaría también por las tonalidades blancas, para dar amplitud a los espacios. En Círculo Muebles podéis encontrar una gran variedad de ofertas en cuanto a cuartos infantiles y juveniles se refiere. Hay que tener en cuenta que los niños crecen muy rápido, así que la opción perfecta es preparar una habitación de bebé que enseguida y con pocos cambios pueda dar el paso a ser la de un niño algo mayor. Es decir, por poner un ejemplo, allá donde vayamos a instalar la cuna, no rodear esta de muebles, sino ir dejando ya el espacio para luego sustituirla por una cama, que ocupará algo más. Si vamos a poner un armario, es mejor que este tenga ya el fondo suficiente para las perchas de un adulto, ya que en cuanto el pequeño empiece a crecer no va a caber su ropa dentro colgada. Asimismo, no es necesario que compremos un cambiador para bebés. Puede bastar con poner una cómoda que le sirva para cuando crezca e instalar sobre ella un colchón donde cambiarlo sin que le resulte muy dura la superficie del mueble.

El espacio para los juguetes

Una vez los niños empiecen a crecer, os daréis cuenta de que todos sus juguetes están invadiendo vuestro hogar. No todos los padres lo llevan bien, especialmente aquellos que precisan de un orden en casa para sentirse a gusto y no tener la angustia de ver que todo está patas arriba. Algunos solucionan esto cuando tienen una casa grande estableciendo una habitación de juegos, donde los niños hacen todo lo que les da la gana, por decirlo de alguna manera, pero no sacan sus cosas de ahí. Para esa habitación hay como una licencia y todo puede estar tirado y por los suelos mientras no traspase la puerta.

Si este no es tu caso y tu vivienda tiene unas dimensiones más reducidas, nuestro consejo es que instales unos baúles o cofres de mimbre en los que al niño le resulte muy sencillo meter todos los juguetes en cuanto acabe de jugar para irse a la cama y dejarlo todo limpio y recogido. Es más práctico y da más sensación de orden que ponerlo en una librería.

 

Notas relacionadas

Scroll al inicio