Ayer aproveché que era sábado para quedar con una de mis amigas que va a ser mamá dentro de poco, y gracias a que ahora con las tabletas podemos acceder a internet en cualquier parte, en la misma terraza me estuvo enseñando unos caftanes de la marca de ropa al por mayor de mujer HHG. ¿Pero a cuento de qué os comento esto? Pues porque mi amiga y yo llegamos a hablar de este tipo de ropa porque me contó que sentía frustrada a la hora de ir a comprar ropa durante el embarazo.
Ana, que así se llama mi mejor amiga, me decía que las mujeres embarazadas lo tienen muy complicado a la hora de escoger ropa para todos los días y situaciones durante el periodo de gestación. La oferta que existe es muy pequeña, especialmente para los bolsillos que andan más cortos y que normalmente visten de tiendas para todos los públicos de esas grandes que nos encontramos en cualquier centro comercial. Cadenas que al final acaban haciendo todas lo mismo: unos pantalones vaqueros con cintura elástica para que no molesten a la altura de la tripa, alguna camisa blanca para un momento más arreglado y camisetas simplonas sin mucho estampado o quizás con algunas rayas.
Esto no sirve para todas las mujeres. Hay más situaciones en la vida que requieren de ropa diferente. Por ejemplo, te puede pillar el verano y querer vestir algo fresco, como le ocurría a mi amiga con los caftanes de HHG, pero que ella no los puede adquirir por sí misma, ya que esta empresa española solamente vender al por mayor a los profesionales del sector. E incluso, si os fijáis, hasta para ir arreglada a trabajar las mujeres embarazadas tienen problemas. Y entonces me comentó el caso de la presidente de la Junta de Andalucía, Susana Díez, que viste con ropa holgada pero no premamá, lo que se nota en las pinzas que le hacen las blusas a la altura de las axilas. Quizás, como mi amiga me apuntaba, incluso ella se encuentre con problemas a la hora de adquirir prendas algo más elegantes (dado su puesto de importancia en el Gobierno de la comunidad autónoma) pero hechas especialmente para embarazas.
Por eso, se me ha ocurrido compartir con vosotros, que quizás estéis viviendo este problema, que una tienda con precios razonables pero especializada en la ropa premamá puede ser un gran negocio, ahora que está tan de moda aquello de establecerse por nuestra cuenta porque parece ser un milagro encontrar trabajo por cuenta ajena.
Como me comentaba mi amiga, no es necesario hacer un gran gasto comprando a proveedores que se dediquen solamente a esta ropa, que normalmente suele ser más cara. Sino que es conveniente saber seleccionar prendas que puedan ser del gusto de todas las mamás en diferentes mayoristas. Es el caso de los caftanes que ella me enseñaba de HHG. Se trata de una prenda muy fresquita para el verano y que cualquier mujer puede lucir dada su anchura. Los precios de esta mayorista son muy razonables dada la relación calidad-precio, por lo que representan una buena compra. Además, se pueden seguir utilizando después del embarazo.
Y es que esa es otra de las preocupaciones de mi amiga embarazada, que además de no saber qué hacer tras la gestación con la ropa especial que había comprado, le parecía que todas las mujeres (por esa escasa variedad de artículos que os comentaba antes) visten igual durante este periodo.
En definitiva, que ahí os dejo esta idea que creo que a más de uno os puede servir si estáis decididos a abrir vuestra propia empresa pero todavía no os habíais decantado por ningún nicho de mercado en concreto.