Tener un hijo no es nada sencillo en la actualidad. La incorporación hace unas décadas de las mujeres al mercado laboral ha hecho que su dedicación exclusiva al cuidado de los hijos o la casa dejase de ser eso justamente: exclusiva. Por lo tanto, una vez llega el bebé, aunque siempre es una alegría, supone también un nuevo inconveniente a la hora de organizarse en la familia. Las cuidadoras externas o las que vienen a nuestra casa son una opción, pero es cierto que no está siempre al alcance todos los bolsillos y muchas veces casi resulta más rentable dejar de trabajar que pagar a alguien para que venga a hacerlo a nuestra casa, cuando directamente no salimos perdiendo dinero.
Los abuelos son otra de las mejores opciones. Lo hacen con gusto (o eso creemos) y además no nos resulta nada caro. Pero no todas las familias tienen la misma situación. Muchas veces los abuelos ya estaban dentro de ese núcleo de personas a las que los padres de la criatura debían ofrecer sus cuidados, por lo que en lugar de aportar ayuda, se suman junto al bebé a las nuevas obligaciones. Hoy os proponemos desde este artículo quitaros los complejos de malos hijos por enviarlos a una residencia de ancianos o a pisos gestionados por estos centros, con sus cuidadores, como los que ofrece la empresa Acomodare, de la que hablaremos más adelante por ser una de las mejores en este sentido.
Decimos que debemos saltarnos los prejuicios porque muchas personas creen que delegar el trabajo en una residencia de ancianos no es más que dar de lado a nuestros mayores. Y nada más lejos de la realidad. Lo que realmente estamos haciendo es ofrecerles unos cuidados entregados por otras personas que nosotros, dada la situación, no podríamos darles, por lo que estamos atendiéndoles mucho mejor que si estuviesen con nosotros en casa.
Como decíamos, Acomodare es una de las mejores empresas en este sentido para el cuidado de los mayores. La residencia y el centro de día de Acomodare, sito en Esplugues (Barcelona) dispone de unas instalaciones modernas muy luminosas con habitaciones tanto individuales como compartidas. Asimismo, cuenta también con zonas comunes que se caracterizan por los espacios diáfanos y sin barreras arquitectónicas. La comida, que es otro de los factores a tener muy en cuenta a la hora de llevar a cabo nuestra elección del centro geriátrico, se define en Acomodare por su calidad y variedad. Todos los días los residentes pueden elegir el menú que van a tomar, algo que para muchos es de suma importancia.
Pero no solo eso, sino que Acomodare cuenta también con otro tipo de servicios, como la fisioterapia o las actividades. Los mejores centros se caracterizan por estar equipados con los aparatos y materiales necesarios para realizar los tratamientos específicos que los residentes precisan.
Si nuestros mayores prefieren más independencia, se puede también tirar de otras opciones como los pisos tutelados con variedad de servicios generales y asistenciales. Acomodare es una de las empresas que los ofrece también. Este tipo de viviendas están preparadas, al igual que los centros, sin barreras que molesten a sus inquilinos, y dichos apartamentos cuentan con restaurante, biblioteca, sala de estar, sala de juegos de mesa, cine, gimnasio, salón de belleza y también vigilancia. Asimismo, hay plazas de aparcamiento y trastero.
Por último, otra opción para muchos que prefieren seguir en sus casas o en las de sus hijos puede ser la atención a domicilio para que los profesiones ofrezcan su ayuda en las actividades de la vida diaria, como vestirse, ducharse, levantarse de la cama, salir o entrar de la bañera o ir a la calle para hacer la compra. Esta opción puede ser por unas horas o de forma permanente durante todo el día. En Acomodare encontraremos la que mejor nos venga.